Te invitamos a conocer el Valle de la Luna o Ischigualasto, en San Agustín del Valle Fértil, San Juan.
Tanto se lee, tanto se imagina el lugar… Que cuando uno accede a él, todo queda sin sentido. Porque no hay palabras que lo expliquen, ni términos que puedan hablar de tanta belleza. Porque hay que experimentarlo, y hasta que alguien no tiene el calzado con un color entre marrón y rojizo no sabrá de esta maravilla. El polvillo del lugar, queda impregnado, en las ropas, en nosotros para no olvidarlo nunca.
El Valle se conoce así, ya que Ischigualasto significa «sitio donde se posa la Luna». Ubicada a 335 kilómetros de la capital provincial, ofrece información de la flora y la fauna que habitaron el planeta hace unos 210 millones de años.
Lo mejor de nuestro patrimonio
Impagable, increíble, impresionante… Un viaje de ida, porque quien va siempre está volviendo. Físicamente o no. Porque lo que se ve es más de lo que se ve, son millones de años, que nos cuentan sus historias. Que nos invitan a saber más de la Tierra, en nuestra tierra. Eso es el Parque Provincial y Reserva Provincial Natural Ischigualasto.
Declarado Patrimonio Natural de la Humanidad en el año 2000, protege el yacimiento paleontológico del período triásico de la era mesozoica y comprende 62.916 hectáreas donde el viento, el agua y los cambios de temperatura moldearon diferentes figuras en la piedra. Fue creado en 1971, y desde entonces ha recibido a millones de turistas que llegan para ser testigos de algo tan raro como único.
Todo esto claramente explicado en el Museo que se presenta en el ingreso del parque. Pero por si fuese poco, lo que se verá es más que barato, por el valor que tiene el lugar. El Circuito Clásico cuesta para residentes en Argentina $100, sanjuaninos $60 y no más de $70 para jubilados y estudiantes tanto de San Juan como de todo el país. Solamente para aquellos que sean del extranjero la entrada cuesta $160.
Vamos de paseo…
El Cerro Morado es una de las formaciones que se pueden visitar y si se quiere ascender hasta allí cuesta tan sólo $100. Este gigante macizo de 1.750 metros es lo primero que vamos a ver, con una corona de basalto que se destaca. Luego el paseo continúa con un circuito principal de 42 kilómetros que no deja de impresionar.
Entre las formaciones rocosas que se distribuyen en el Parque se encuentran El Gusano, Valle Pintado, La Esfinge, El Kiosco, Barrancas Coloradas, Elefantes Echados. Todos repartidos por diferentes formaciones del lugar: Los Rastros, Ischigualasto, Los Colorados e Ischichusca. Los tres primeros se diferencian por los colores de sus piedras y paredes.
En Ischigualasto, que está en el centro del lugar y cuenta con 200 millones de años de antigüedad, se encuentran las postales más históricas del lugar. La Cancha de Bochas presenta piedras redondas perfectas, que llegaron a lo más bajo del terreno rodando a través de los años. El Hongo una geoforma extraña con erosión diferencial, de arenisca dura arriba y arcilla blanda abajo, es tal vez el más conocido junto al Submarino. Este último ubicado en lo más alto del circuito, donde se sostiene un enorme bloque de piedra donde la erosión logró salientes casi iguales.
Las maravillas continúan. Pero es momento que ustedes mismos las vean y hagan los circuitos especiales. Es momento de que ustedes también sean parte del Valle donde se posa la Luna.
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